Una muestra analiza los premios femeninos locales del siglo XX
La controversia comenzó en la inauguración de la exposición Las reinas del Trabajo. Belleza, Virtud y Producción en la Argentina del siglo XX, en el subsuelo del Espacio Casa de la Cultura (Avda. de Mayo 575). «Acá faltan Isabel Sarli y Susy Leiva», señalaba Orestes Sartorelli, un visitante agudo. Pero la muestra no es una colección de fotos de mujeres hermosas, sino un testimonio del papel, ideales y valores femeninos según pasan los años.
Así, más de 100 fotos y dos audiovisuales demuestran cómo fueron cambiando las cosas desde que se entregaban los premios a la virtud, que otorgaba la Sociedad de Beneficencia, hasta la coronación de la Reina del Trabajo durante el gobierno peronista.
Es el resultado del trabajo de cuatro años de un equipo de investigadoras del Instituto Interdisciplinario de Estudios de Género, de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA. El proyecto está dirigido por Mirta Zaida Lobato, y también dio origen al libro Cuando las mujeres reinaban. Belleza, virtud y poder, recién editado por Biblos.
En las fotos se ve a las reinas del Trabajo elegidas durante los festejos del 1º de Mayo entre las obreras de fábricas y el campo. También la de la Vendimia, en Mendoza, y la del Petróleo, en Comodoro Rivadavia, la única que se vestía de negro. Todas, con el cetro de la CGT. También se muestra a las mujeres en plena labor, y hasta visitando sets de filmación: se las ve con Mirtha Legrand durante el rodaje de Pasaporte a Río. La muestra, organizada por la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad, permanecerá colgada hasta el 30 de mayo, de martes a domingo, de 14 a 20.
EN EL COLÓN Y EN LA CASA ROSADA
«Era un homenaje al trabajador, no un concurso de belleza», señala la reina de 1952, Edna Constantini, sin encontrar demasiados puntos de contacto entre su reinado y el de Miss Argentina, que llegó después y que sí tiene a Coca Sarli entre sus ganadoras.
«En esa vitrina están mis bandas y la corona», muestra Malber Bertaina en la inauguración, más de 50 años después del día de su asunción. «Yo me iba retirar… tenía novio. Pero un día llegué al trabajo y ya me habían anotado. Me decían que tenía el pelo largo y la piel de porcelana… me hacían creer de todo», sigue Bertaina, risueña.
«Hacia fines del siglo XIX los hombres dominaban el espacio público, mientras que las mujeres ocupaban los puestos de reinas del hogar», explica Zaida Lobato. El recorrido de la exposición empieza cuando la Sociedad de Beneficencia otorgaba premios a la Virtud: la humildad, el amor filial y fraternal, en el Teatro Colón, desde 1823 y durante un siglo.
En tanto, en el documental que se proyecta todos los días, a las 18, asoman imágenes del 1º de Mayo de los noticieros de la época: grandes concentraciones pacíficas, pancartas, pericón y desfile de carrozas.
«La elección de la Reina del Trabajo era el momento más esperado. Por décadas, belleza y trabajo se habían considerado incompatibles», indica Zaida Lobato. Las elecciones existieron entre 1948 y 1955. En 1974 se quiso volver a implantar la elección, pero el país no estaba con ánimos. La última monarca, Teresa Reale, fue coronada en 1975 por María Estela Martínez de Perón, pero no recibió los generosos regalos de Eva ni los viajes organizados por Perón. «La corona era de una joyería de Plaza San Martín. Terminada la ceremonia, más o menos me la arrancaron de la cabeza. Me la prestaban después para los actos», comenta Reale. Su foto, sonriente desde el balcón de la Casa Rosada, pero sin público, pone punto final a la exposición. Y también a una época. .
María Paula Zacharías
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Categorías:Muestras, ferias y bienales
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