No tienen por qué ser sólo de plástico o de peluche. Ahora, se revaloriza lo artesanal y el diseño llevado al juguete. ¿El resultado? Cantidad de piezas de trapo, de tela, interactivos o tejidos. De diseñadores reconocidos o anónimos creadores, se venden por Internet, en tiendas propias, casas de diseño, marcas de ropa, jugueterías y hasta en museos. Son mucho más que monigotes
Por María Paula Zacharías | Para LA NACION

Son objetos de diseño interactivos. Monono es una silueta blanca sobre la que cada chico pinta su muñeco. «Promueve la creatividad y el intelecto. El chico ya no es un espectador, sino parte del juego», dice Lucía Conte, arquitecta y hacedora de mononos. Se venden en un frasco con seis marcadores de tinta lavable y vuelven a ser blancos tras un paso por el lavarropas. En dos tamaños (desde $ 40), o en familia de cuatro ($ 100). Los hay para armar, con piezas que se unen con abrojos. A partir de 3 años.
En la juguetería Abracadabra (Olazábal 2558), 20% de descuento con Club La Nacion hasta fin de mes; www.nalha.com.ar
CORAZÓN DE LANA AMIGURUMIS

Los amigurumis o peluches de punto ya están por todos lados. «Se hacen con una técnica japonesa que consiste en tejer pequeños muñecos en crochet», explica Mariela Gómez, una de las tantas que los hace y los vende con su marca, Corazón de Lana. «Mis amigurumis están hechos para ser disfrutados, me encanta realizarlos y pensar que van a ser parte importante en la vida de alguien», comenta esta gran tejedora. A mano, con hilo de algodón y rellenos con vellón siliconado hipoalergénico, sirven para bebes y chicos; también se los busca para deco. Pony por $ 150; bailarinas y oveja, $ 80; macetas con tulipanes, $ 40, y conejos, $ 90.
En facebook/CorazóndelanaAmigurumis ; corazondelana2012@gmail.com ywww.ofeliafeliz.com
CORAZÓN DE ALGODÓN

«Son mascotas como las que hacían nuestras abuelas, con amor y retazos de tela. Cada una es una miniobra de arte, ninguna igual a otra», define Romina Lamarque, que dice que más que comprados, sus muñecos deben ser adoptados. «La idea es revalorizar lo artesanal y generar un juguete con lo que hay.» Tiene gatos, conejos, elefantes, perros y ponys (entre $ 55 y 65).También, almohadas con forma de gato y búho, y pufs. Se les puede bordar un nombre a pedido. «Retomar una prenda nos permite generar productos con espíritu nostálgico.» Por amor a los animales, hizo ballenas y pingüinos para la Fundación Ecocentro, Puerto Madryn.
En su showroom de Villa Urquiza, con cita previa por el 4546 2337;www.corazondealgodon.com
SINFIN

Pensados para bebes y la primera infancia, sus líneas los definen: de apego, de trapo, sonajeros, de granja y muñecos térmicos, entre otros. Con diseños alegres, variedad de colores y texturas, y terminaciones cuidadas en plush, towel, interlock y polar, y con rellenos de vellón siliconado. Sinfín fue ganadora de Buenos Aires Emprende 2009 y están aprobados por normas IRAM. Algunos precios: muñeca, $ 85; pelota rana, $ 57; títeres de mano, $ 42; muñeco térmico, $ 95, y con pelo de lana, $ 42.
En las jugueterías Giro Didáctico, Callao 1160 y sucursales; www.sinfinweb.com
SOPA DE PRINCIPE

En 2001, Verónica Longoni empezó a hacer muñecos y hoy tiene una empresa familiar con una tienda en Palermo que parece una verdulería de muñecos: se exhiben en cajones de madera, apilados como manzanas o peras. Trabaja con telas de algodón, botones para los ojos o piezas de fieltro, si los usan menores de tres años. Son piezas de museo, ya que se venden en la tienda del Malba y estuvieron en la del MoMA, Nueva York; de exportación. Ahora también hacen ropa, accesorios y piezas de decoración lúdicas. Hay prendedores desde $ 9; animales, de $ 68; muñecas, de $ 76, y perros grandes, de $ 242. Monstruos y muñecas gigantes, desde $ 420.
En Thames 1749; www.sopadeprincipe.com.ar
JUANA DE ARCO

«En la colección El Arca de Juana de Arco hicimos para un desfile dos ratitas, y un comprador japonés las vio y me pidió 60 para vender. Una vez salieron dos muy feas que parecían dinosaurios-ratas y vino una española que se las llevo para sus hijas gemelas», dice Mariana Cortez, sobre la génesis de los muñecos de Juana de Arco, que ya son de culto. Se hacen con los retazos de la colección de ropa y el relleno es de tela también, lo que les da peso corporal. Son altos como un chico de dos años. «Están hechos a mano, uno a uno; todos diferentes. Tienen corazón aplicado al cuerpo», describe Mariana Cortez, su diseñadora. Están pensados para chicos de 1 a 3 años, pero hay mayores de 30 que los llevan por «lindos». Tienen nombre y apellido: Budi Budi Large Teddyrat ($ 330) y Budi Budi Small Teddyrat ($ 270).
En El Salvador 4762, Paseo Alcorta y Recoleta Mall.
Categorías:Cultura y sociedad
Hermosos trabajos, me podrías compartir el patrón del pony? Muchas gracias…muy lindo lo q hace.
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Hola Daisy, te recomiendo que para eso, te pongas en contacto con Mariela Gómez, la autora, facebook/CorazóndelanaAmigurumis ; corazondelana2012@gmail.com
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